miércoles, 8 de octubre de 2014
On 10:40 by CEMI Torreón in Escuela para padres
Qué
Hacer Si Su Hijo(a) Está Siendo Molestado(a) o Intimidado(a)
(What to Do If Your Child Is Being Bullied)
¿Qué es Molestar o Intimidar (Bullying)?
El acto de molestar o intimidar (Bullying)
es todo comportamiento agresivo que sea intencional y que implique un
desequilibrio de poder o de fuerzas. Los actos de molestar o intimidar pueden
tomar diversas formas tales como: golpear o empujar (molestia o intimidación
física); burlar o insultar (molestia o intimidación verbal); intimidación a
través de gestos o exclusión social (molestia o intimidación no-verbal o
emocional); y enviar mensajes insultantes por correo electrónico
(“ciber-intimidación”).
Efectos de los Actos de Molestar o Intimidar:
Los actos de molestar o intimidar pueden
tener consecuencias graves. Los niños y jóvenes que son molestados o
intimidados son más proclives que otros niños a:
•
Estar
deprimidos, solitarios, ansiosos
•
Tener
baja autoestima
•
Faltar
a la escuela
•
Sentirse
enfermos
•
Pensar
en el suicidio
Reportando
los Actos de Molestia o Intimidación a los Padres
Los niños frecuentemente no les dicen a sus
padres que están siendo molestados o intimidados porque se sienten
avergonzados, apenados o atemorizados de los niños que los están molestando o
intimidando, o tienen miedo de ser vistos como "soplones". Si su hijo
o hija le cuenta que fue molestado(a) o intimidado(a), eso significa que debió
reunir mucho coraje para decírselo. Su hijo o hija necesita que usted lo/la ayude
a detener el acto de molestia o intimidación.
Qué Hacer Si Su Hijo Está Siendo Molestado o Intimidado
• Nunca le diga a su hijo o hija que ignore
la molestia o intimidación. Lo que el niño o niña podría
"oír" es que usted es quien va a
ignorarlo. Si el niño o niña fuese capaz de simplemente ignorarlo, él o ella no
le habría dicho nada al respecto. Muchas veces, tratar de ignorar las molestias
o intimidaciones permite que se vuelvan más serias.
• No culpe al niño o niña que está siendo molestado(a)
o intimidado(a). No suponga que su hijo o hija hizo algo para provocar el acto
de molestia o intimidación. No diga,"¿Qué hiciste para irritar al otro
niño?".
• Escuche con cuidado lo que su hijo o hija
le relata sobre el incidente de molestia o intimidación.
Pídale que le describa quién estuvo
involucrado y cómo y dónde tuvieron lugar cada uno de los episodios de molestia
o intimidación.
• Averigüe todo lo que pueda sobre las
tácticas de molestia o intimidación que se están usando y cuándo y dónde
ocurrieron los incidentes. ¿Su hijo o hija puede nombrar a otros niños o
adultos que pudieron haber presenciado el acto de molestia o intimidación?
• Establezca un lazo de empatía con su hijo
o hija.
Dígale que molestar o intimidar está mal,
que no es su culpa, y que usted se alegra de que él/ella hayan tenido el coraje
que decírselo. Pregúntele a su hijo o hija qué cree él/ella que se puede hacer
para ayudar. Asegúrele que usted pensará qué necesita hacerse y qué le hará
saber lo que usted planea hacer.
• Si usted está en desacuerdo con el modo
en que su hijo o hija manejó la situación de molestia o intimidación, no lo/la
critique.
• No fomente las represalias físicas
("Devuélveles el golpe") como solución. Golpear a otro estudiante probablemente
no termine con el problema, y podría hacer que su hijo o hija sea suspendido(a)
o expulsado(a), o agravar la situación.
• Controle sus emociones. Los instintos
protectores de un padre provocan emociones fuertes. Aunque sea difícil, es
sabio de parte de un padre dar un paso al costado y considerar los pasos
siguientes con cuidado.
Contacte al/a la docente y/o director(a) de su hijo o hija
• Los padres a menudo se resisten a
reportar los incidentes de molestia o intimidación a los funcionarios
escolares, pero dichos incidentes no se detendrán sin la ayuda de los adultos.
• Controle sus emociones. Brinde
información concreta sobre la experiencia de su hijo o hija al ser molestado(a)
o intimidado(a)-quién, qué, cuándo, dónde y cómo.
• Enfatice que desea trabajar con el
personal de la escuela para encontrar una solución para detener la molestia o
intimidación, por el bien de su hijo o hija y también del resto de los
estudiantes.
• No contacte a los padres del/de los estudiante(s)
que molestó/molestaron o intimidó/intimidaron a su hijo o hija. Esta es
usualmente la primera respuesta de un padre, pero a veces empeora las cosas.
Los funcionarios escolares deberían contactar a los padres del niño o niños que
cometieron los actos de molestia o intimidación.
• Espere que las molestias o intimidaciones
cesen. Hable periódicamente con su hijo o hija y con el personal de la escuela
para ver si las molestias o intimidaciones cesaron o no. Si las mismas persisten,
contacte nuevamente a las autoridades escolares.
Ayude a su hijo o hija a volverse más
resistente a las molestias o intimidaciones
• Ayude a desarrollar talentos o atributos
positivos en su hijo o hija. Sugiera y facilite actividades como la música,
deportes y arte. Hacerlo puede ayudar a su hijo o hija a sentirse más seguro(a)
entre sus pares.
• Aliente a su hijo o hija a hacer contacto
con estudiantes amigables en su clase. El/la docente de su hijo o hija podría
estar en posición de sugerir estudiantes con los cuales su hijo o hija podría trabar
amistad, pasar tiempo o colaborar en el trabajo.
• Ayude a su hijo o hija a conocer nuevos
amigos fuera del ámbito escolar. Un nuevo medio ambiente puede brindar un
"comienzo de cero" para un niño o niña que ha sido repetidamente
molestado(a) o intimidado(a).
• Enséñele a su hijo o hija estrategias de
seguridad. Enséñele a buscar ayuda de un adulto cuando él/ella se sienta
amenazado por alguien que lo/la molesta o intimida. Hable acerca de las
personas a quienes podría recurrir en busca de ayuda y practique un juego de
roles con lo que él/ella deberían decir. Asegúrele a su hijo o hija que reportar
molestias o intimidaciones no es lo mismo que ser un "soplón".
• Pregúntese a usted mismo(a): ¿Mi hijo o
hija está siendo molestado(a) o intimidado(a) debido a una dificultad de
aprendizaje o a una falta de destrezas sociales? Si su hijo o hija es
hiper-activo(a), impulsivo(a) o habla por demás, el niño que molesta o intimida
podría estar reaccionando por irritación. Esto no justifica la molestia o intimidación,
pero podría ayudar a explicar por qué su hijo o hija está padeciendo estos
actos. Si su hijo o hija irrita fácilmente a la gente, busque la ayuda de un
consejero para que su hijo o hija pueda aprender mejor las reglas sociales
informales de su grupo de pares.
• El hogar es ahí donde está el corazón. Asegúrese
que su hijo o hija tenga un ambiente seguro y cariñoso en su hogar donde
él/ella pueda buscar refugio, tanto física como emocionalmente. Siempre
mantenga abiertas las líneas de comunicación con su hijo o hija.